A este bizcocho marmoleado le he tenido que quitar la bola de helado a última hora para añadirle un vaso de leche bien caliente, ¡¡¡QUE FRÍÍÍÍÍÍÍÍÍOOOOOOOOOO!! Ya ves como me gustan las recetas sencillas, ricas, caseras, y a poder ser con chocolate. Esta es una de esas recetas que yo llamo del día a día. Ahora que tanto se lleva la repostería creativa, que cuanto más espectacular es la receta mejor, yo voto por la sencillez (de nuevo), no digo que no me guste ese tipo de repostería, faltaría más, pero desde Hoja de Menta también queremos darle cariño a la repostería más tradicional. No se si os pasa lo mismo que a mi, que cuando estoy haciendo este tipo de bizcochos que no requieren ninguna técnica especial, me recuerdan a esas madres y tías a las que la repostería moderna les parece un tren que va muy deprisa, y me da nostalgia… Sigue leyendo